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Expertos Cirugía Plastica

Acné: Causas, Tratamientos y Consejos para una Piel Saludable

Acné es una afección cutánea común que afecta a personas de todas las edades. En nuestro centro de cirugía plástica, entendemos las preocupaciones que puede generar el acné y ofrecemos soluciones efectivas para combatirlo. En este artículo, te brindaremos información detallada sobre las causas del acné, los tratamientos disponibles y consejos para mantener una piel saludable y libre de imperfecciones.

acné
Índice

    ¿Qué es el Acné y cuáles son sus Causas?

    El acné es una afección de la piel que se caracteriza por la obstrucción de los poros, inflamación y la aparición de granos, espinillas y puntos negros. Las principales causas incluyen:

    1. Producción excesiva de sebo: El sebo es una sustancia aceitosa producida por las glándulas sebáceas de la piel. Cuando se produce en exceso, puede obstruir los poros y favorecer la aparición de acné.
    2. Obstrucción de los poros: Los poros pueden obstruirse debido a la acumulación de sebo, células muertas de la piel y bacterias. Esto crea un ambiente propicio para la proliferación de bacterias y la inflamación.
    3. Cambios hormonales: Las fluctuaciones hormonales, especialmente durante la adolescencia, pueden desencadenar la producción de sebo y contribuir al desarrollo del acné.
    4. Factores genéticos: Existe evidencia de que la predisposición genética puede influir en la susceptibilidad de una persona al acné.

    Tratamientos para el Acné

    En nuestro centro de cirugía plástica, ofrecemos una variedad de tratamientos efectivos para combatir el acné y mejorar la apariencia de la piel. Algunas opciones de tratamiento incluyen:

    1. Productos tópicos: Los productos tópicos, como cremas y geles, contienen ingredientes activos que ayudan a reducir la producción de sebo, desbloquear los poros y disminuir la inflamación. Estos productos suelen contener ácido salicílico, peróxido de benzoilo o retinoides.
    2. Terapia láser: La terapia láser es un tratamiento no invasivo que utiliza luz intensa para destruir las bacterias que causan el acné y reducir la inflamación. Además, puede ayudar a mejorar la apariencia de las cicatrices dejadas por el acné.
    3. Tratamientos médicos: En casos más severos de acné, se pueden recetar medicamentos orales, como antibióticos, isotretinoína o anticonceptivos hormonales, para reducir la inflamación y controlar la producción de sebo.
    4. Procedimientos dermatológicos: Algunos procedimientos dermatológicos, como la microdermoabrasión o los peelings químicos, pueden ayudar a exfoliar la piel y mejorar la apariencia de las cicatrices y las marcas dejadas por el.

    Consejos para una Piel Saludable y Libre de Acné

    Además de los tratamientos profesionales, existen hábitos y cuidados diarios que puedes incorporar en tu rutina para mantener una piel saludable y prevenir la aparición del acné. Algunos consejos incluyen:

    1. Limpieza facial adecuada: Lava tu rostro dos veces al día con un limpiador suave y adecuado para tu tipo de piel. Evita frotar enérgicamente, ya que esto puede irritar la piel y empeorar el acné.
    2. Hidratación: Utiliza una crema hidratante no comedogénica para mantener la piel hidratada sin obstruir los poros.
    3. Evita tocarte la cara: Evita tocar tu rostro con las manos, ya que esto puede transferir bacterias y empeorar el acné.
    4. Dieta equilibrada: Mantén una dieta equilibrada, rica en frutas, verduras y alimentos con bajo índice glucémico. Evita alimentos grasos y procesados, ya que pueden contribuir al desarrollo del acné.
    5. Protección solar: Utiliza protector solar diariamente para proteger tu piel de los dañinos rayos solares. Busca productos específicos para pieles propensas al acné y no comedogénicos.

    SIGNOS Y SÍNTOMAS

    Las manifestaciones sintomáticas del acné son evidentes y generalmente muy acentuadas en la cara: son comedones, pápulas, quistes, hasta cicatrices reales que también afectan la dermis.

    El acné se manifiesta en diferentes formas: pústulas, espinillas, quistes y fístulas son solo algunas de las lesiones de acné más frecuentes.

    Los granos pueden aparecer en cara, cuello, pecho y espalda. La causa del acné puede ser genética, hormonal (ciclo menstrual, adolescencia, embarazo, síndrome de ovario poliquístico), bacteriana (Propionibacterium acnes) o psicológica (estrés, ansiedad, tensión, depresión).

    TIPOS DE ACNÉ

    Básicamente, es posible distinguir dos formas diferentes de acné: el acné endógeno y el acné exógeno.

    El acné endógeno, que se define como acné vulgar o juvenil, afecta el área de la piel de la cara, el pecho, los hombros y el tronco; puede surgir debido a factores hereditarios o ambientales, como los trastornos alimentarios y el estrés.

    La aparición de esta forma de acné es muy frecuente en la pubertad y por esta razón se llama acné juvenil. Este período de tiempo, de hecho, se caracteriza por una sobreproducción de hormonas androgénicas, que conducen a una hipersecreción sebácea con la formación de comedones.

    La espinilla puede causar inflamación debido al acné. El acné exógeno es provocado por factores iatrogénicos, cosméticos o contaminantes laborales.

    MEDICAMENTOS PARA EL ACNÉ

    Los medicamentos que se pueden usar para tratar el acné son diferentes.

    La elección de usar un ingrediente activo en lugar de otro depende solo del médico y depende de una serie de factores, como la causa desencadenante, el tipo de acné que afecta al paciente, la gravedad con la que ocurre y la respuesta del paciente.

    ANTIBIÓTICOS

    Una de las posibles estrategias terapéuticas para el tratamiento del acné implica la administración de antibióticos tópicos, como clindamicina y eritromicina.

    Estos antibióticos inhiben la subunidad ribosómica de la bacteria, deteniendo así el proceso de formación de la cadena de polipéptidos; en última instancia, este bloqueo de la síntesis de proteínas hace que se detenga la proliferación bacteriana.

    Son antibióticos con acción bacteriostática, pero a altas dosis pueden volverse bactericidas. Los efectos secundarios más comunes también se realizan en la piel, con ardor, sequedad e irritación en el área de aplicación.

    Existen varias clases farmacéuticas en el mercado, útiles para la profilaxis dermatológica del acné.

    El metronidazol actúa como un antiinflamatorio contra un protozoo que se encuentra principalmente en las glándulas sebáceas de la cara (Demodex brevis, mejor conocido como ácaro) y es efectivo para el tratamiento del acné rosácea.

    Además, este medicamento se presenta como efectos secundarios de ardor, sequedad e irritación en el área de aplicación. En casos particularmente graves de acné, el médico puede decidir proceder con la administración oral de antibióticos.

    TÓPICOS ANTIMICROBIANOS

    El peróxido de benzoilo y el ácido azelaico se usan como tópicos antimicrobianos.

    Además de ser antibacterianos, los ingredientes activos mencionados también tienen propiedades controladoras de grasa, queratolíticas y comedolíticas, efectivas en el tratamiento del acné y sus manifestaciones.

    LOS RETINOIDES

    Los retinoides son medicamentos dermatológicos potentes, ampliamente utilizados. En particular, el acidoretinoico o tretinoína, aplicado sobre la piel, donde tiene una absorción de menos del 10%, promueve la descamación de los queratinocitos y el recambio celular.

    También se puede aplicar sobre la piel dañada por la foto porque promueve la síntesis de colágeno y nuevos vasos sanguíneos.

    El ácido retinoico debe aplicarse sobre la piel seca, evitando áreas delicadas como las fosas nasales, los ojos, los labios y las membranas mucosas. Es una molécula insoluble en agua y altamente fotosensible, por lo que es mejor no exponerse a la luz solar durante el tratamiento.

    Otro ingrediente activo en esta categoría farmacológica es la isotretinoína, un retinoide sintético utilizado para la terapia del acné quístico. El tratamiento se realiza por administración oral y es muy efectivo.

    Sin embargo, se debe prestar atención a los posibles efectos secundarios: además de la sequedad e irritación de la piel, se ha demostrado un efecto teratogénico, que permanece durante mucho tiempo incluso después de la interrupción, ya que el medicamento se elimina muy lentamente.

    LOS CORTICOSTEROIDES

    Otros medicamentos dermatológicos utilizados en el tratamiento farmacológico del acné son los corticosteroides tópicos, utilizados por su actividad antiinflamatoria.

    La formulación en lociones, geles, ungüentos y cremas, se desarrolla adecuadamente con vehículos que facilitan la absorción del principio activo.
    Se usan glucocorticoides en acné, dermatitis seborreica, dermatitis alérgica y queratosis. En casos graves como el acné quístico, se necesitan inyecciones locales.

    Los efectos secundarios pueden ser locales (atrofia de la piel, hipertricosis, aumento de la presión intraocular, telangiectasias) o sistémicos (síndrome de Cushing, retraso en el desarrollo).

    QUERATOLÍTICOS

    Los agentes queratolíticos también pueden usarse en el tratamiento del acné. Estas sustancias pueden adelgazar el engrosamiento del tejido de la piel, mejor conocido como queratosis.

    Las queratosis son patologías de la piel, que involucran principalmente las áreas del palmar: en este caso hablamos de queratoderma palmar; o pueden ocurrir en áreas traumatizadas por la exposición excesiva al sol y en este caso tendremos queratosis actínica, caracterizada por manchas grisáceas con halo rojizo.

    Sin embargo, el ácido salicílico, el propilenglicol y el podofilo son agentes queratolíticos:

    • El ácido salicílico es capaz de solubilizar las proteínas de las células de la capa de la piel, es decir, tiene una acción de descamación; sin embargo, esta acción puede causar irritación y posibles lesiones en el sitio de aplicación.
    • El propilenglicol tiene acción queratolítica, que puede mejorarse con vendajes oclusivos.
    • El podófilo tiene acción antifúngica y reduce la proliferación de queratinocitos. Los efectos secundarios más comunes son los fenómenos de enrojecimiento y ulceración. Se administra comúnmente para el tratamiento de verrugas agudas, verrugas particulares que facilitan la entrada del virus del papiloma.

    En resumen, los agentes queratolíticos son muy útiles en el tratamiento del acné porque, gracias a sus mecanismos de acción particulares, pueden liberar el folículo piloso obstruido, promoviendo así la desaparición, o en cualquier caso la atenuación, del trastorno.

    TERAPIA HORMONAL

    Durante periodos de producción hormonal alta, como el ciclo menstrual, se puede usar una terapia con acetato de ciproterona y etinilestradiol.

    Cabe destacar, que este enfoque terapéutico especial solo puede llevarse a cabo en mujeres y, en cualquier forma, no garantiza resultados eficaces. Por supuesto, la dispensación de medicamentos similares para el tratamiento del acné solo puede realizarse previa presentación de una prescripción médica específica.

    REMEDIOS DE FITOTERAPIA

    Hay alternativas fitoterapéuticas contra el acné, como remedios sistémicos para drenar, purificar y reducir la inflamación, y remedios tópicos hidratantes y desinfectantes para la piel.

    Entre los posibles remedios herbales disponibles actualmente para el tratamiento del acné, mencionamos:

    • Bardana: Posee una acción antibiótica, purificante, diaforética y colagoga; Reduce la proliferación bacteriana en el folículo sin inducir efectos secundarios. Por esta razón, se usa con frecuencia en el tratamiento del acné.
    • Aceite de árbol de té: Tiene una acción antibacteriana y, por lo tanto, se utiliza para el tratamiento del acné refractario y la furunculosis.
    • Viola tricolor: Contiene flavonoides con acción purificante, emoliente y antiinflamatoria.

    En presencia de acné, también se pueden usar abedul, diente de león, fumaria, equinácea y caléndula.

    TRATAMIENTOS DERMOESTÉTICOS

    En general, los tratamientos dermo estéticos se usan tanto para el tratamiento directo del acné, como para mitigar y, preferiblemente, eliminar los resultados de cicatrización derivados de esta dolencia.

    Entre los principales tratamientos dermo estéticos que se pueden utilizar en esta área, mencionamos:

    • Exfoliaciones químicas.
    • Dermoabrasión y microdermoabrasión.
    • Terapia con láser.

    Para obtener información detallada sobre tratamientos para el acné, consulta a especialistas calificados, especialmente al administrar medicamentos.

    Cada caso de acné es único, consulta a un profesional de la salud para un diagnóstico preciso y un plan de tratamiento personalizado.